Volver Descubra más de Shimano

Consejos para configurar tu manillar para obtener un mayor confort y control

A menudo subestimado, el manillar es uno de los componentes más importantes de tu bici de carretera. Junto con los pedales y el sillín, es uno de los tres puntos de contacto que definen cómo interactúas con tu bici y la carretera. También es volante de tu bici, controlando cómo se comporta la bici y también desempeña un papel crítico en el ajuste y la aerodinámica.

Como mínimo, tu manillar debería proporcionar tres cómodas posiciones de mano, en la parte superior, en las capuchas y en la caída. Si no es el caso, es el momento de ajustar (o sustituir) algo o buscar ayuda a un biomecánico profesional.

"Hace diez años, ajustar el manillar se consideraba un proceso sencillo", explica Chris Jacobson, Director de línea de producto de PRO Bike Gear y bikefitting.com. “Tenías un borde recto y alineabas el extremo de la maneta de los frenos a la base de la caída del manillar. Sin embargo, las formas de los manillares han evolucionado y en la actualidad la norma es tener una transición plana suave de la barra a la capucha de las manetas de frenos. La idea es que la capucha esté en el mismo plano que la barra, lo que proporciona una buena plataforma donde apoyar tus manos. El objetivo es tener un ángulo neutro de la muñeca.”

 

Posición de la capucha del cambio y el manillar

 

Obtener una posición neutra puede parecer complicado, pero es relativamente sencillo mover las capuchas para obtener el ángulo de muñeca deseado. Simplemente localiza la fijación dentro de la capucha, afloja el tornillo de apriete y luego gira o ajusta según sea necesario.

“Esto puede incluir girar las capuchas hacia adentro hacia la línea media de la bicicleta o cambiar su elevación en el propio manillar en vez de simplemente girar el manillar”, explica Jacobson. "Una vez que tengas una configuración con la que te sientas bien, sal con la bici y mira si hay algún lugar caliente en las palmas. Esto te ayudará a saber dónde se encuentran los puntos de presión. A continuación, puedes reorientar las capuchas para minimizar esa presión. Se trata de un proceso de prueba y error que puede llevar algo de tiempo, pero definitivamente merece la pena.”

 

Además, recuerda que buscas una configuración que proporcione un uso cómodo de las tres posiciones de las manos. Si por ejemplo, pocas veces utilizas la caída del manillar, probablemente es un síntoma de que algo no está bien. Puede que tengas el manillar demasiado alto porque tus capuchas están posicionadas demasiado bajas en el manillar. En este caso, muchos ciclistas intentan girar el manillar hacia arriba para reducir el alcance de las capuchas, pero también moverás las caídas más lejos en lo que podría ser una posición poco útil. En esta situación, es mejor reposicionar las capuchas sobre el manillar, incluso si eso significa quitar la cinta y volver a ponerla en el manillar para obtener la posición correcta.

“Por lo general, es mejor configurar tu ángulo de manillar primero”, recomienda Jacobson. "Una vez hecho esto, puedes ajustar las manetas. Lo que no quieres hacer es modificar uno para resolver un problema con otro, porque simplemente estarás creando un problema nuevo.”

 

Forma y talla del manillar

 

Otra importante consideración es la forma del manillar. Si bien los manillares solían tener un único diseño básico con distintos anchos, en la actualidad es posible elegir entre distintas cantidades de alcance y caída. Estas mediciones definen la distancia hacia adelante del manillar antes de curvarse hacia abajo y lo bajo que la parte inferior del manillar está con respecto a su punto central de fijación.

“La elección de un alcance y caída adecuados a menudo se reduce a la preferencia del ciclista”, comenta Jacobson. "Normalmente, en una bici de carretera quieres un manillar que tenga un alcance mayor y más caída para maximizar tu ventaja aerodinámica. Simplemente recuerda que tienes que tener la flexibilidad adecuada para utilizar esta posición tan agresiva. La tendencia en los últimos 10 años ha sido hacia manillares con una caída menor, digamos de 140 mm a 120 mm o incluso 110 mm de forma que más ciclistas puedan montar cómodamente en las caídas o en posición aerodinámica."

 

De hecho, a menos que seas un profesional o ciclista amateur élite, es poco probable que una forma clásica de manillar con un largo alcance y una caída baja tenga sentido. "Sí claro, es bueno para la aerodinámica", comenta Jacobson. “Pero la mayoría de las personas no podrán mantener cómodamente ese tipo de posición hacia adelante y abajo.”

Una talla adecuada del manillar es otra consideración básica en el proceso de configuración. La regla general es que el ancho del manillar debería ser igual al ancho del hombro, aunque puedes optar por algo más estrecho o ancho en función de la aplicación.

 

“Un poco más estrecho puede ser una buena idea para la carretera mientras que más ancho suele ser la opción preferida para aventuras en gravel con más suciedad ya que mejora la estabilidad y el control”, explica Jacobson. “Simplemente recuerda que tus hombros solo tienen fuerza en un determinado rango de movimiento, así que si utilizas un manillar muy ancho puede dar lugar a un menor control.”

 

Alcance de la maneta de frenos

 

Una vez que hayas decidido el ancho del manillar y luego definido la posición de las capuchas, querrás ajustar el alcance de las manetas de los frenos, que determina lo lejos que tienes que extender tus dedos para frenar.

“La mayoría de manetas de freno Shimano permiten ajustar el alcance”, indica Jacobson. "Como punto inicial, recomiendo que las configures de manera que puedas alcanzarlas con la primera falange de tu dedo índice. De esa forma, estarás seguro cuando vayas a sujetar y accionar tus palancas de freno. Esto también ayuda a reducir la fatiga porque es más fácil retener la tensión con un puño cerrado frente a una mano abierta.”

 

Materiales del manillar

 

El material de fabricación es la última consideración. Normalmente, los manillares de carbono son más ligeros y tienen un mejor comportamiento al amortiguar el ajetreo de la carretera, pero son más caros. Los manillares de aluminio son a menudo más pesados pero cuestan menos y a menudo crean una sensación de mayor conexión que algunos ciclistas aprecian.

Tanto si estás empezando con la bici o estás buscando una forma de mejorar tu posición de conducción, empieza con la selección y ajuste de tu manillar. Juega con la posición hasta que encuentras la que mejor te vaya y mejorarás drásticamente tu experiencia sobre la bici.

Compartir este artículo

Historias relacionadas